AUTOEMBRUJO
AUTOEMBRUJO.
A algunas personas las cosas no les resultan como ellas las planean, o de plano
todo les sale mal, están “salados” dicen algunos. Esto puede ser algo natural
de la vida normal o una consecuencia sobre todo porque hicieron algo mal, y en
algunos casos sí hay un trabajo de brujería.
En el autoembrujo, las personas que lo
padecen aseguran que fuerzas negativas son las que las están dañando, o bien
llegan al extremo de culpar a alguien.
Los embrujos entran generalmente por la
mente. No porque una persona se lo imagine, sino porque la parte energética por
donde una acción de embrujo entra es por la mente. Y es fácil que alguien nos
sugestione diciéndonos que nos están embrujando. Y necesitamos que un buen
brujo nos diga con honestidad si nuestro mal es de origen médico, energético o
psicológico.
Lo primero que tenemos que hacer en una
mala racha, es un examen de conciencia para saber si lo que estamos haciendo lo
estamos llevando a cabo de buen modo. Por ejemplo, si te va mal en el trabajo,
antes de pensar “el jefe me tiene mala fe”, “los compañeros están haciendo algo
para que me corran”, “me están embrujando”. Pregúntate: ¿estoy llegando
temprano?, ¿estoy rindiendo lo suficiente?, ¿estoy preparado para la actividad
a la que me dedico?, ¿soy conflictivo?
Es muy probable que si contestas con
sinceridad encuentres las posibles fallas, y las corrijas. Pero si no, hay que
hacer un test para saber si estás embrujado. Los principales indicadores son:
1.- ningún médico sabe cuál es tu
padecimiento.
2.- te tropiezas continuamente porque
sientes que te jalan un pie.
3.- te persigue la mala suerte
últimamente.
4.- las circunstancias de tu vida
cambiaron repentina e inesperadamente volviéndose en tu contra.
5.- padeces de dolores de espalda que
antes no sentías, sobre todo en el hombro derecho.
6.- te despiertas sin motivo aparente
todas las noches entre las 3:00 y 5:00 A.M.
7.- todos tus proyectos se caen justo
cuando los vas a concretar.
8.- tus amistades se han alejado sin motivo
alguno.
El autoembrujo es algo parecido a la
hipocondría, un trastorno en el que la persona se siente enferma de todo e
incluso dice sentir los síntomas, por lo cual se la vive visitando médicos y
ellos nunca encuentran nada malo; se cree que la persona lo hace por recibir
atención y por sentir que le preocupa a alguien. Ramón Sáenz (2008: 104-7).
Tomado
de mí libro Diccionario de Dioses, Demonios y Enfermedades del México Prehispánico.
Inédito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario