RUDA
Nilda
Macías
Ruta graveolens (hembra)
Es una de las plantas de los dioses.
Fue muy utilizada desde Asia menor hasta
la India. Tenía aparentemente un significado religioso, aunque antiguamente fue
muy utilizada como alucinógeno.
Desde tiempos remotos la ruda ha sido una
de las plantas de mayor popularidad. Se caracteriza por su olor penetrante y su
sabor marcadamente amargo. Se le atribuyen propiedades mágicas y terapéuticas. Su
mayor poder es el de alejar la mala suerte.
Fue una de las plantas preferidas de
reyes, faraones y brujos.
Ruta chalepensis (macho)
Magos y adivinos preparaban esencias de
ruda y confiaban en ella para purificar la mente, aumentar el control mental,
alcanzar la clarividencia, romper los hechizos, defenderse contra el mal de ojo
y deshacer cualquier hechicería.
Como amuleto es el más popular para
transmutar la energía en positiva. Un gajito de ruda en el bolsillo se
transforma en amuleto protector de espíritus maléficos.
Una hoja dentro del zapato protege ante
situaciones o personas difíciles.
En la medicina antigua, Galeno, ilustre
médico griego, y Plinio, escritor y naturalista latino, le dieron reputación
para calmar fiebres de picaduras de avispas. El zumo de las hojas machacadas
previene picaduras de arañas, alacranes, en caso de mordedura de serpiente
demoraban el efecto del veneno. Además, el zumo de sus hojas con un pequeño
agregado de alcohol sirve para frotar los músculos y aliviar calambres, en caso
de gripes se fricciona la espalda, el masaje alrededor del ombligo calma el
dolor de estómago.
En infusión es un buen purificador de la
sangre. Para el acné pasar un algodón embebido de la infusión por el rostro, es
astringente. Un té de ruda es remedio para las anginas.
La caña con ruda ahuyenta los males, así
cuenta la tradición incaica cuya costumbre de honrar a la Pachamama o la madre
tierra perdura hasta nuestros días. Tomando una copita en ayunas el primero de
agosto es rito propiciatorio de buena salud para todo el año. El macerado se
debe preparar vertiendo en la botella de caña un gajo de ruda al menos un mes
antes de ese día, otros dicen que se guarda el año entero.
En cuanto a la superstición se destaca por
su poder de planta protectora del hogar, ya que actúa como un boomerang,
neutralizando la energía negativa para devolver a quien la envía. Es una planta
cuyas hojas perciben las vibraciones adversas y expelen su olor, es decir, da
el aviso cuando a nuestro hogar entró alguien cuya carga energética es
negativa.
Limpieza de la casa: si vivimos un periodo
de nerviosismo, irritación, preocupaciones, de seguidilla de situaciones
adversas, es momento de limpiar la casa. En este acto, a la vez que saneamos
nuestra vivienda de todo lo negativo desinfectamos, especialmente si
atravesamos una etapa de enfermedad. También ahuyentamos posibles maleficios y
transmutamos la energía, atrayendo todo lo positivo.
Para realizar la limpieza, prender unos
carboncitos y agregar las hojas de ruda secas, cuando empieza a largar el humo
distribuir la emanación en toda la casa, especialmente en los lugares donde
recibimos las visitas. Esas hojas pueden ser de nuestra propia planta, todas
aquellas que se hayan secado se guardan para realizar la limpieza.
La ruda
es también conocida como la planta del perdón, por lo cual al aromatizar
estamos relegando rencores, olvidando enojos y buscando que afloren nuestros
sentimientos más positivos. Recordemos que una mente positiva genera
pensamientos positivos.
El lugar de la planta en la casa: debe
estar colocada en la parte posterior. Si es ruda macho de hojas ovaladas y
grandes debe estar en el lado izquierdo. En el lado derecho, si es ruda hembra
de hojas pequeñas.
Imagen de Internet
Cuando la ruda empieza a secarse lo mejor
es dejarla, no sirve tratar de salvarla pensando que nos seguirá protegiendo. Si
se seca es que la absorción de vibraciones negativas fue muy fuerte, y en este
caso no queda más remedio que tirarla y reemplazarla por una nueva.
Es importante expresar el deseo por el
cual estamos convocando el poder de la ruda aun si lo único que hacemos es
elegirla entre las plantas y flores que forman parte de la energía que nos
rodea.
Hembra y macho
Bibliografía:
SUPERSTICIONES. Cómo cambiar tu suerte.
Nilda Macías. 2008 Editorial Diana, S. A. de C. V. México, D. F.