Translate

martes, 21 de octubre de 2014

CUAUHTÉMOC, último tlahtoani azteca.

CUAUHTÉMOC
ANTONIO FCO. RODRÍGUEZ ALVARADO



     Cuauhtémoc. (1502- 1525). n. en Tenochtitlan y m. en Izancanac. De cuauh(tli), águila + temo, descender, caer:“Águila que desciende o que cae.” Fue el decimoprimero y último de los tlahtoani mexicas, de 1520 a 1521. Hijo de Ahuízotl y  descendiente de Netzahualcóyotl por parte materna (su madre era Tiyacapantzin o Tilalcápatl). Otras versiones señalan que su madre era una princesa chontal y que nació en 1496. Señor de Tlatelolco, tomó posesión del trono a la muerte de su primo Cuitláhuac, en diciembre de 1520. Debido a las circunstancias en que se encontraba el pueblo a consecuencia de la invasión española, no se celebraron fiestas y se sacrificó a unos cuantos prisioneros de la batalla de la Noche Triste. Desplegó entonces una gran actividad diplomática tratando de ganar aliados entre sus antiguos vasallos, a los que prometió no cobrar más tributo en tanto que les advertía del peligro que significaba para ellos la caída de Tenochtitlan, ciudad que fortificó en espera del ataque de Cortés, quien contaba  con  más de 80,000 aliados, principalmente los tlaxcaltecas, mientras que el joven emperador trataba de prepararse a la batalla con los pocos recursos que le quedaban, debido a que la epidemia de viruela mató un gran porcentaje de la población y gran parte de sus soldados quedaron ciegos a causa de la misma. El ejército de Cortés era mayor que el de Cuauhtémoc y finalmente después de 93 días de sitio aquel tomó la ciudad el martes 13 de agosto de 1521. Cuauhtémoc se embarcó en una canoa junto con su familia: Tecuixpo su mujer, el tlahtoani de Tlacopan Tetlepanquetzal, el Cihuacóatl Tlacotzin, el tlahtoani de Texcoco Coanacotzin, y otros caudillos para ponerse a salvo pero fue alcanzado por un bergantín al mando de García Holguín y hecho prisionero de los españoles. Llevado ante Cortés pronunció las palabras que describen claramente su carácter, y que han pasado a la historia como muestra de su valentía y nobleza: “Ya que hice cuanto era necesario en defensa de mí ciudad y de mí pueblo y no puedo más. Y puesto que  vengo preso y por la fuerza ante tu persona, toma luego el puñal y mátame con él”. Cortés admiró la valentía del prisionero, motivo por el cual fue benévolo con él, en un principio. Padeció el tormento de serle quemado los pies con aceite hirviendo para que revelara en dónde se encontraba escondido el tesoro de su pueblo. Lo cual causó que quedara baldado para siempre. Cuauhtémoc lo sufrió junto con Tetlepanquetzal, señor de Tlacopan, y cuanto éste no pudo resistir más, se quejó desconsoladamente. El joven emperador dijo: ¿estoy yo acaso en un deleite o baño? Que más tarde se transformara como: ¿estoy yo acaso en un lecho de rosas? Cuauhtémoc fue casado con Tecuichpo (Copo real de algodón), quien era hija de Moctezuma ll. 


     Después de la caída de Tenochtitlan, fue bautizado como Fernando de Alvarado Cuauhtémoc, y su esposa como doña Isabel Moctezuma. El caudillo quedó inválido teniendo que usar muletas y, al igual que otros dignatarios indígenas, fue dejado como señor de Tlatelolco (1521-1523), para auxiliar a los conquistadores en funciones judiciales y administrativas, especialmente en la recaudación de tributos. Cortés dirigió una expedición hacia las Hibueras (Honduras) llevando consigo al  emperador azteca, así como al señor de Texcoco y al señor de Tlacopan. 


     La expedición atravesó lo que hoy se conoce como los estados de Veracruz y Tabasco; pasando vicisitudes, llegaron finalmente a un lugar llamado Acallán (Alcalá) en los primeros días de febrero de 1525. Cortés recibió rumores por parte de Mexicantzincatl de que Cuauhtémoc y sus compañeros trataban de recuperar el poder y decidió darles muerte, mandándolos a la horca, en la ciudad de Izancánac la noche del 28 de febrero de 1525, poniendo como excusa la conspiración. Algunos historiadores difieren de la fecha y lugar donde fue muerto. Hace algunos años se dijo haber sido descubiertos los restos de su cuerpo en Ichcateopan, Gro. Más que los huesos cercanos al polvo vale la grandeza de su alma y de su ejemplo para la juventud mexicana, o como bien lo comenta el verso de uno de nuestros poetas modernos: “Único héroe a la altura del arte”.


     Cuauhtémoc, Último mensaje de. El lunes 12 de agosto de 1521, un día antes de ser capturado, Cuauhtémoc llamó a su Consejo de Gobierno y emitió lo que se conoce como:


“El último mensaje de Cuauhtémoc”

Nuestro destino ya se ocultó,
Nuestro sol ya majestuosamente desapareció su rostro,
Y en un lugar completamente oscuro
Nos ha dejado.

Ciertamente sabemos otra vez volverá,
Que otra vez saldrá
Y nuevamente vendrá a alumbrarnos.
En tanto que allá entre los muertos permanezca
Muy rápido reunámonos
Congreguémonos
Y en el centro de nuestro corazón escondamos
Todo nuestro corazón lo que ama
Y sabemos nuestra riqueza
Nos es como gran esmeralda
Hagamos desaparecer nuestros templos,
Nuestras escuelas de altos estudios, nuestros juegos de pelota,
Nuestras escuelas para jóvenes, nuestras casas de canto,
Que sólo queden nuestros caminos
Y nuestros hogares que nos preserven.
Hasta cuando se digne salir nuestro nuevo sol,
Los venerados padres y las veneradas madres
Que nunca se olviden de
Decirles a sus jóvenes
Y enseñarles a sus hijos,
Mientras vivan,
Precisamente cuan buena ha sido
Hasta ahora nuestra amada ANÁHUAC,
Donde nos cuidan nuestros dioses,
Su voluntad y su deseo,
Y sólo por causa de nuestro temor de ellos y nuestra humildad ante ellos
Que recibieron nuestros venerados antecesores
Y que nuestros venerados padres,
A un lado y otro en las venas de nuestro corazón,
Los hicieron conocer en nuestro corazón.
Ahora nosotros entregamos la tarea a nuestros hijos:
Que no olviden, que les informen a sus hijos
Intensamente cómo será su elevación,
Cómo nuevamente se levantará nuestro venerable sol;
Y precisamente cómo reservará su fuerza
Precisamente cómo cumplirá grandiosamente su promesa
Esta nuestra venerada y amada tierra madre ¡ANÁHUAC!

(Tlacatzin STIVALET)


     Tomado de mi libro: Los Tuxtlas nombres geográficos pipil, náhuatl, taíno y popoluca. Analogía con las cosmologías de las culturas mesoamericanas. Ediciones Culturales Exclusivas. 2007.


martes, 7 de octubre de 2014

CALMÉCAC Y TELPOCHCALLI

CALMÉCAC Y TELPOCHCALLI
ANTONIO FCO. RODRÍGUEZ ALVARADO


Calmécac. De cal(li), casa + meca(tl), cuerda, lazo, cordel, mecate y figuradamente los corredores largos y estrechos + c, en:   “En el cordel o hilera de casas”.  Escuela azteca en que se preparaban los hijos de los nobles para ser sacerdotes o jefes. Dentro de los calmécac más antiguos figuraban los de la ya abandonada ciudad de Xochicalco, donde recibió durante veinte años toda su preparación Ce-Acatl Topiltzin Quetzalcóatl. Los calpullis (barrios) más importantes contaban de ordinario con un calmécac, existían al menos 6 calmécac en Tenochtitlan. Recibían educación civil y religiosa bajo una disciplina muy severa, pues los dedicaban a los oficios más rudos y a hacer sacrificios cruentos en su cuerpo. Era una especie de monasterio y de colegio, pues allí moraban sacerdotes en gran número, que educaban a los muchachos. Se sustentaba una estricta preparación del cuerpo para la batalla, de la mente para vivir y servir, y del espíritu para el perfeccionamiento interior como meta suprema y a la vez para llegar con dignidad a la muerte. En esa casa estaba la imagen de Quetzalcóatl. Velasco Piña (2003), Rodríguez (2003).



Telpochcalli. De telpochtli o telpuchtli, muchacho, adolescente, + calli, casa: Casa de los jóvenes. Colegio, universidad destinada a los jóvenes de clase media. Casi todos los calpullis (barrios) tenían su propio telpochcalli. Estaban consagrados al dios Tezcatlipoca. Estaban dirigidos por jefes llamados Telpuchtlato. Pintábanse el cuerpo de negro, a excepción del rostro, vestían el máxtlatl (mastate, taparrabo), y por todo abrigo la manta llamada clalcaayatl, de pita torcida de maguey, en forma de red floja y rala; era este el distintivo de estos colegios civiles. La embriaguez era castigada con pena de muerte. De estos seminarios se retiraban para casarse; y para lograr su separación daban al Telpuchtlato diez o doce mantas grandes, llamadas cuachtli (cuascles); el superior les hacía un largo razonamiento recomendándoles sus deberes. Chavero, tratando de señalar las diferencias entre el calmécac y el telpuchcalco, dice que el calmécac era uno solo y estaba en el templo mayor; los sacerdotes daban en él la educación, y sus mancebos se sujetaban a la jurisdicción del sacerdocio, que podía condenarlos aún a muerte.  Enseñábanse allí las ciencias, que eran patrimonio exclusivo del templo; su objeto principal era formar ministros de sus dioses; pero se daba como asesoría la instrucción militar. El telpochcalco tenía por objeto principal la instrucción en las cosas de guerra, aunque por la conexión que había entre el sacerdocio y el poder guerrero se hacían también ejercicios religiosos. En las pinturas de los Códices se manifiesta esta diferencia poniendo negros el cuerpo y el rostro de los mancebos del calmécac, y únicamente el cuerpo de los del telpochcalli. Velasco Piña (2003), Rodríguez (2003).


    Tomado de mi libro: Los Tuxtlas nombres geográficos pipil, náhuatl, taíno y popoluca. Analogía con las cosmologías mesoamericanas. Incluye diccionario de localismos y mexicanismos. 2007. Ediciones Culturales Exclusivas. Boca del Río, Veracruz.