domingo, 16 de enero de 2022

ESCUDILLA Antonio Fco. Rguez. A. Poema Erótico.

 

ESCUDILLA

Antonio Fco. Rodríguez Alvarado

 

Imagen de Internet

 

De visita al bazar encontré una gran escudilla plateada y de inmediato pensé en ti. La llevé a casa,  y al regresar unas horas más tarde, me sorprendió verte completamente acostada y desnuda sobre ella.

 

 

     Contemplé a mis anchas este riquísimo y erótico platillo. Todo un buffet, el cual fui besando y mordisqueando… encontrando sabores, olores y texturas en toda tu voluptuosa anatomía, cuya calidez reaccionaba con finos escalofríos a la frialdad del afortunado contenedor.

 

 

     Mis besos y mordiscos te provocaban finos ayes y  prolongados y dulces  gemidos de placer.  Las caricias de mis manos atemperaban tus escalofríos, y  pronto tu cuerpo se fue encendiendo provocando una profusa transpiración que exacerbó la sensual humedad y el perfume de tu piel.

 

 

     Tus labios los tenías entreabiertos como esperando el beso o la apasionada mordida que aumentara aún más el gran deseo de amarnos.

Tu mirada me seguía. Tus párpados se abrían y cerraban no queriendo perderte de esta fantasía sexual en que me tenías atrapado.

 

 

     Sentí en las yemas de los dedos las trémulas sacudidas de tus nervios y tus músculos, tal como suena a mis oídos una convulsa y perenne percusión acústica. Mi cuerpo se electrizó con las descargas que emanaban del tuyo, generando al momento un apasionado éxtasis de deseos, de locura y de lujuria.

 

 

     Te tomé en mis brazos, acostándonos sobre la alfombra, y en ella,  al compás de  un sexual, viejo y candente ritual nuestros cuerpos y nuestras almas se hicieron una sola.

 

 

 

Xalapa, Ver. 14.01.2020